miércoles, 26 de agosto de 2009

MAQUETAS LITERARIAS

UN ACERCAMIENTO A ESE GRAN AGUJERO NEGRO QUE ES LA LITERATURA DE J.J REYNOSO.
Por Jimena Pascutti
El escritor imagina historias inconclusas, relatos inesperados, narraciones fallidas, fragmentos que se distinguen de otros por leves variaciones, formas liberadas de la obligación de significar. Imagina todo esto durante los días de encierro en el viejo Hotel de Las Lajas, luego los escribe en hojas sueltas que va acumulando en una bolsa de supermercado. El escritor es Juan José Reynoso, autor de ¿Qué?, una obra difícil de catalogar, editada a fines de los ochenta en medio del tsunami de la hiperinflación. En ella se propone narrar escenas, hacer esbozos de maquetas literarias, mínimas narraciones que tratan de articular palabras sostenidas por el caos.
En ¿Qué?, Reynoso se vale de cierta visualidad abstracta asociada a lo bucólico para retratar un mundo efímero, condenado a desaparecer desde su nacimiento. Un apego secular a la tierra, subyace en una serie de sucesiones fugaces, algo oníricas, donde ciertos elementos como cuchillos, clavos, picaportes, relojes imponen su presencia. Esto le permite convertir su literatura en una fuente de experiencia sensible, y a la vez hacer recapitulaciones reflexivas de sus obsesiones como la introducción del espacio ilustrativo en sus textos.
Reynoso nos habla de una irrealidad donde confluyen escenas mínimas repletas de color a las cuales es necesario acercarse para ver y sentir eso que refulge, estalla, provocando incomodidad, tratando de hacer cómplice al lector de sus planteos espaciales, narrativos que eluden al orden visual restando importancia al sentimiento poético en una apuesta que lo acerca a los imaginistas.
Es acertada la propuesta de Rubén Rogelio Almada, en el prólogo de la primera edición, de concebir estos textos como islas subversivas la autodestrucción, el deseo, la asfixia, en una cosmogonía donde en primer lugar se lo apresa al lector y luego se lo invita a desentrañar y comprender ese sistema. Lo que no deja de ser un juego perverso, pues no hay puerta de salida o al menos no está en el sitio que se supone.
La literatura de Reynoso desde su primer libro, Óxido, lucha contra el prejuicio de que esta debe ser pura, la idea del escritor inspirado por las musas siempre le pareció molesta, siempre prefirió la del hombre que se hunde en el fango, para rescatar de la inminente descomposición a un cadáver, al cual se debe practicar una autopsia con urgencia.
La obra de Reynoso está hecha a partir de flujos de información que son capturados, y en un momento dado tras ser manipulados, cuidadosamente analizados son puestos en movimiento en ese dispositivo llamado libro. ¿Qué?, es un buen ejemplo de esto, y se evidencia desde las primeras líneas donde el lector presiente estar por ingresar a un universo de simultaneidad, del zapping, puesto que a veces las oraciones se asemejan a una lluvia ácida que corroe todo, y en otras establecen puntos de singularidad donde las soluciones que se proponen, dos párrafos después se desconstruyen obligándonos a volver al principio, a esa primera línea deudora de Eliot y Girri ( No habrá tiempo para oír lo que insinúa la lluvia gota a gota rama a rama desnudando lo oscuro.),que contradice a aquellos que intentan hallar en ese punto el embrión de ese mundo, pues este existía desde antes, en las lecturas previas, ya que para adentrarnos en ¿Qué? , debemos obviar el modelo tiempo-espacio como un continuo, y pensarlo en términos de átomos.
J.J.Reynoso en la suite de un hotel centríco.

1 comentario:

  1. Excelente la elección de los textos. Bueno que hagan esto. Creo, sin embargo, no entender muy bien la propuesta: literatura? reflexión? El Manifiesto es confuso. El nombre y la foto no me gustan. Con la mejor onda porque saben que los quiero mucho. Adelante.
    Estaremos conectados
    Marcelo

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