Que podría darte yo, después de quedar desnuda, con el alma hasta las rodillas, ceñida por tu brazo duro y joven.
Yo soñaba con una mujer, y su nombre como un presagio me ardía, hasta que una mañana ella vino a habitar mi fiebre.
A veces la saliva no es más que el preludio que anticipa la ejecución.
La lengua afanosa se extiende dibujando aristas afiladas , amatistas hirvientes.
En el amor la muerte está escrita y se la percibe en la saliva pegajosa del deseo, en la boca balbuceante que confiesa su derrota ante los embates de la carne.
Que podría darte yo, después de quedar desnuda, con el alma hasta las rodillas que una pequeña muerte nacida de mi boca.
M.G.FREITES
Yo soñaba con una mujer, y su nombre como un presagio me ardía, hasta que una mañana ella vino a habitar mi fiebre.
A veces la saliva no es más que el preludio que anticipa la ejecución.
La lengua afanosa se extiende dibujando aristas afiladas , amatistas hirvientes.
En el amor la muerte está escrita y se la percibe en la saliva pegajosa del deseo, en la boca balbuceante que confiesa su derrota ante los embates de la carne.
Que podría darte yo, después de quedar desnuda, con el alma hasta las rodillas que una pequeña muerte nacida de mi boca.
M.G.FREITES
con el alma hasta las rodillas ...con su derrota...me fascina!
ResponderEliminarLas derrotas silenciosas, las que lastiman, en la brevedad de tus apuntes/ si caes marcos, quien te levantará= hasta cuando finges ser una chica_ aflora ese machismo... esa pose de chico problemáticos. cuanto es verdad-cuanto mentira-solo la calabaza sabrà
ResponderEliminar00000000000000¿Marina?1111111111111111111111111
Nunca creí en vos m.g freites siempre me pareció artificial esa postura que tenés, me sucede algo extraño cuando teleo, es como si tus textos estuviesen tras una cortina de humo que impiden ver la esencia, sólo alcanzó a distinguir el ornamento, el resplandor que emanan, y ese sadismo.Esa violencia que fluye descaradamente.
ResponderEliminarMarion
Muy interesante, a ver, trataré de aportar un breve y superfluo análisis, más que una simple opinión o calentura hacia Freites.
ResponderEliminarInteresante, de partida la autoría masculina vs hablante lírico femenino. Recordé las jarchas, esos poemas principiantes de la literatura lírica (española). Creo que rasgos de otras épocas afloran nuevamente en este contexto contemporáneo.
Me gusta como une dos temas, el amor y la muerte, que según la etimología van de la mano. La muerte que como mordaza, que a su vez no están lejanas, comparten la misma raíz. La muerte en la boca, es rescatable, la paradoja que utiliza, inicio y término en la vida y muerte, ese término incompleto, porque sólo llega hasta las rodillas. El que la muerte no nos deje carne, porque la carne es de los amantes.
Me gustó, y sabes cuando soy sincera; no es más de los mismo.
J.A.
J.A me parece apropiado tu comentario, sobre todo cuando hablamos de Freites alguien que construye permanentemente personaje border que tienen el coraje de echar una mirada al abismo que los rodea, que le sacan la lengua a las convenciones. Otro aspecto para remarcar son los "yo" femeninos , chicas extrañas con gatos, con fobias, con monstruos interiores, chicas que caminan con los pies descalzos sobre las brasas.
ResponderEliminarUn abrazo desde esta gélida ciudad, Maximiliano G.
Hay algo que brilla ahí; brilla fuerte...
ResponderEliminar